ALBALATE DE ZORITA

Albalate de Zorita (Guadalajara) perteneció, durante la edad media, a la Orden de Calatrava, hasta que en 1.569 se convirtió en señorío de Ruy Gómez de Silva, príncipe de Éboli, y luego de don Rodrigo de Silva y Mendoza, familia que la regentará hasta el siglo XIX.
A dos kilómetros del pueblo se conserva la ermita de Cubillas (actual cementerio) del municipio. Edificada en el siglo XIII, la portada es de estilo románico tardío, con arco apuntado con decoración de punta de diamante en las arquivoltas bajo alero de 31 canecillos de diversos temas: figurados, vegetales, animales, contenido sexual.

Portada de la ermita de Cubillas

En la parte superior, la dóvela del arco, hay representado un Agnus Dei que más parece reutilizado de otra construcción.

Agnus Dei

Los capiteles de dicha portada representan motivos vegetales, como hojas de vid y uvas e higos.

Capitel izquierdo de la portada

En la parte izquierda de la portada, pasado el contrafuerte que tiene dicho muro, podemos ver la única ventana que tiene dicha ermita al exterior, dando también la impresión de haber sido reutilizada y puesta ahí en otro momento diferente al de su construcción. Encima de dicha ventana podemos ver dos de los 31 canecillos que hay en todo este muro.

Ventana y canecillos

Ya en el interior de la ermita, de la que sólo se conserva el ábside muy reformado en el exterior, está este arco de medio punto con el mismo tipo de decoración que el arco de la portada sur. Dicho arco está situado entre el ábside y el muro sur de la ermita.

Arco interior

Con relación a los canecillos que hay en el muro sur, como ya hemos comentado, son de diversos motivos. Los mostrados a continuación representan la cabeza de un perro u oso y una cara humana. En dicha cara humana aún se conserva parte de la policromía original de este canecillo, sobre todo la pintura negra que se utilizada para marcar los bordes de las figuras. En el ojo izquierdo de dicha cara es más visible dicha policromía.

Canecillos

Entre la temática de los canecillos, se encuentra la sexual. El siguiente canecillo así nos lo muestra con esa actitud un tanto "grosera".
Canecillo de temática sexual

Ya en el interior de dicha ermita, que, como hemos dicho, es el cementerio actual del municipio, encontramos, en la parte norte del ábide, esta ventana donde se muestra cómo se tallaban los sillares según para donde fueran ubicados en la construcción. El sillar de la imagen muestra la forma que se le dío para que formara parte de una ventana.
Ventana interior



Ya en el exterior, y en dirección este, hacia el pueblo, hay una muralla de no mas de 170 cm's que delimita todo el cementerio. Dicha muralla fué construida con los restos de dicha ermita. La prueba que lo certifica es este sillar con marca de cantero que se encuentra entre las ruinas utilizadas para la construcción de dicha muralla.

Sillar con marca de cantero

Por último, una prueba de que las piedras andan, es esta parte de capitel que se encuentra entre las utilizadas en la ermita de San Juan. Dicha ermita se encuentra a medio camino entre el cementerio o ermita de Cubillas y el pueblo. Según reza una placa de madera, dicha ermita fue construida en el siglo XVII y actualmente está totalmente abandonada, derruida y, mirando en su interior, es o fue utilizada como habitáculo para indigentes, incluso como urgente letrina.

Detalle del muro este de la ermita de San Juan